‘Síndrome de Jerusalén’, causas, síntomas y discusión

El llamado 'síndrome de Jerusalén' es una descompensación psicótica de contenido místico que reportan algunas personas cuando visitan Jerusalén.

La religión es un agente muy importante en la vida de un gran número de personas. Aunque algunos autores defienden que su inclusión en el proceso educativo, podría favorecer el ajuste psicológico y la competencia social de los individuos que son expuestos a ella desde pequeños (Bartkowski, Xu, Bartkowski, 2019); esta dimensión también puede estar relacionada, directa o indirectamente con el desarrollo de algunos trastornos mentales específicos (Bhavsar, Bhugra, 2008). Un claro ejemplo de ello, es el llamado Síndrome de Jerusalén, padecimiento caracterizado por el desarrollo de síntomas psicóticos en algunos turistas que arriban a la capital israelí.

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¿Qué es el síndrome de Jerusalén?

El término ‘síndrome de Jerusalén’ fue utilizado por el psiquiatra Yair Bar-El para designar la ‘descompensación psicótica’, que sufre un gran número de turistas cada año al visitar la ciudad de Jerusalén (Bar-El, et.al 2000). Aquellos afectados por este curioso fenómeno suelen presentar un pensamiento delirante en el que piensan que son parte de algún tipo de acontecimiento importante de naturaleza religiosa. En algunas ocasiones, los sujetos se identifican con algún personaje bíblico, mientras que, en otras, creen tener algún tipo de misión o papel vital en eventos trascendentales como la revelación de algún mandato divino, la segunda venida de Jesucristo o el juicio de la humanidad.

Los delirios suelen corresponder a la educación de los afectados. De tal forma, que las personas judías suelen identificarse con personajes y eventos del Viejo Testamento, mientras que los turistas cristianos lo hacen con elementos del Nuevo Testamento (Bar-El, et.al 2000).

La ciudad de Jerusalén tiene un gran significado para gente de muchos credos; por ello, la ciudad se encuentra impregnada de una atmosfera religiosa, capaz de sobrecoger incluso a los no creyentes. No obstante, según los estudios realizados al respecto, el Síndrome de Jerusalén se manifiesta normalmente en personas con algún tipo de condición mental preexistente a la visita a Israel; por lo que los síntomas psicóticos están realmente relacionados con el historial de ansiedad y enfermedad psicológica de los pacientes, mientras que la ciudad solo actúa como un catalizador que despierta o intensifica la afección que ya habita en la mente de los afectados (Witzum, Kalian, 1999; Bar-El, et.al 2000).

Tipos de síndrome de Jerusalén

Aunque existen muchos puntos en común entre los casos, no todos se manifiestan de la misma forma. El Doctor Bar-El ha distinguido tres tipos de síndrome de Jerusalén:

Tipo I: Con antecedentes de Psicosis

Integrado por individuos que han sido diagnosticados anteriormente con algún tipo de psicosis. Por lo general, su visita a Israel está relacionada con su condición mental y la influencia de ideas religiosas, factores que los impulsan a visitar Jerusalén para ‘realizar algo’ o cumplir con una misión o ‘llamado divino’. Los casos de este tipo se dividen a su vez en cuatro subtipos (Bar-El, et.al 2000):

  • Personas con identificación psicótica con personajes de la biblia, las cuales piensan que son, por ejemplo, Moisés, Jesús o la Virgen María.
  • Individuos con identificación psicótica con una idea de naturaleza religiosa, y en ocasiones, incluso de carácter político. Estas personas suelen llegar a Jerusalén con el propósito de actuar de acuerdo a esta idea. Por ejemplo, el dañar una reliquia valiosa para alguna religión en particular con el fin fantasioso de enaltecer otra.
  • Personas con ideas mágicas relacionadas con una conexión entre la salud y algunos sitios santos. Como el pensar que alguien se curará de cáncer de pulmón, solo visitando el Santo Sepulcro.
  • Sujetos que, tras enfrentar problemas familiares, viajan a Jerusalén, donde desarrollan síntomas psicóticos.

Tipo II. Síndrome de Jerusalén superpuesto y complicado por ideación idiosincrática

Esta categoría engloba aquellos casos de personas con problemas de personalidad o una obsesión con una idea fija, pero que no padecen una enfermedad mental clara. Aunque extravagantes, sus ideas no alcanzan dimensiones delirantes o psicóticas. Se dividen a su vez en dos grupos (Bar-El, et.al 2000):

  • Individuos que pertenecen a un grupo. Son un tipo frecuente y se presentan reunidos en espacios públicos o lugares religiosamente significativos, manifestando sus ideas, planes y advertencias. Por lo general, no reciben atención profesional debido a que no suelen generar disturbios o problemas.
  • Individuos solitarios. No son casos muy frecuentes, pero cuando se presentan, suelen ser personas obsesionadas con una idea fija o una tarea que debe ser realizada en Jerusalén. Puede tratarse de predicadores o de individuos en una búsqueda desesperada de respuestas de tipo religioso.

Tipo III: Forma discreta

Es un tipo muy poco frecuente, cuya manifestación se considera la más fascinante. Consiste en individuos sin antecedentes de enfermedad metal que sufren un episodio espontáneo de psicosis mientras se encuentran en Israel, especialmente en Jerusalén. Tras de dicho trance, se recuperan de forma espontánea, y al dejar el país, viven una vida normal. Las personas que sufren este tipo de Síndrome suelen ser turistas sin ninguna intención o idea obsesiva al llegar a Jerusalén (Bar-El, et.al 2000).

Por lo general pasan por una serie de etapas particulares:

  • Estado de ansiedad y agitación.
  • Manifestación de un deseo de alejarse del grupo y visitar las zonas turísticas por su cuenta.
  • Necesidad de estar limpio y de ser puro, manifestada a través de una obsesión por la limpieza.
  • Confección y uso de una toga blanca (frecuentemente hecha de sábanas).
  • Necesidad de gritar o cantar salmos de la biblia.
  • Procesión o marcha a un lugar sagrado de Jerusalén.
  • Proferir un sermón en dicho lugar sagrado.

Durante este episodio las personas responden a su nombre y no suelen presentar alucinaciones. Comúnmente, los pacientes vuelven a la normalidad después de entre 5 a 7 días, momento al que le sigue una recuperación completa.

Cuando se les cuestiona sobre dicho episodio, suelen recordar todo lo sucedido, sin embargo, se sienten avergonzados de sus acciones. 

Factores detrás del Síndrome de Jerusalén

Como ya se ha destacado, los antecedentes de enfermedad mental son el principal factor que determina el desarrollo de Síndrome de Jerusalén en quienes lo sufren. En la gran mayoría de los casos, se trata de personas que viajan a Israel con el propósito de cumplir alguna misión motivada por dichas afecciones psicológicas, y que al llegar a Jerusalén se ven influenciados por el ambiente religioso de la ciudad (Witzum, Kalian, 1999; Bar-El, et.al 2000).

Por otro lado, en casos más raros, como los identificados en el Tipo III, se ha encontrado que los afectados suelen tener una educación religiosa muy rígida; por lo general, proveniente de una formación protestante. Ante esta situación, se ha formulado la teoría de que el episodio psicótico pudiera ser una reacción ante la incompatibilidad de la imagen que tienen estos creyentes de Jerusalén como Ciudad Santa, y la realidad de la Jerusalén moderna. De esta forma, el predicar obedecería a un intento de conciliar estas dos percepciones (Bar-El, et.al 2000).

Otro factor que ha sido explorado para comprender el Síndrome de Jerusalén, es la experiencia misma del viajero; la cual implica un cambio de rutina que influye en el estado mental de los individuos. De esta forma, el choque cultural unido al estar en un contexto físico desconocido podría potenciar el efecto de emotivo que la ciudad tiene para algunos viajeros (Bar-El, et.al 2000). Además, la convivencia durante el viaje con personas con ideas religiosas rigurosas, e incluso afecciones psicológicas, podría dar como resultado el desarrollo de este estado patológico (Poleszczyk, Święcicki, 2013).

Incidencia

El término ‘Síndrome de Jerusalén’ fue acuñado por el Doctor Bar-El, en 1989; sin embargo, este fenómeno no es nuevo. Existen registros de peregrinos que visitaron la Ciudad Santa a principios del siglo XIX y que manifestaron síntomas similares a los descritos hasta aquí. Hecho que hace pensar a numerosos autores, que este fenómeno es aún mucho más antiguo (Witztum, Kalian, 1999).

Tomando en cuenta los ingresos de personas afectadas con este trastorno en instituciones psiquiátricas israelíes; se estima que cada año se presentan alrededor de 100 casos de turistas que desarrollan Síndrome de Jerusalén (BBC Mundo, 2018). No obstante, es necesario recordar que muchos visitantes extranjeros son enviados por sus embajadas a tratarse a sus respectivos países (Poleszczyk, Święcicki, 2013). Además, como ya se ha comentado, los casos de personas con ideación idiosincrática (Tipo II), no suelen ser tratados, ya que no se les considera peligrosos o se les mira como una curiosidad (Bar-El, et.al 2000).  Por lo tanto, el número de personas afectadas por esta afección puede ser aún mayor.

Discusión

Es necesario destacar que el llamado ‘síndrome de Jerusalén’ no es un trastorno mental reconocido formalmente por la Asociación Psicológica Americana (APA) , ni respaldado por ninguna otra entidad Internacional. No obstante, los principales hospitales psiquiátricos y clínicas israelíes son muy conscientes de este fenómeno frecuente, hasta el punto de tener línea directa con embajadas de muy diversos países para la supervisión de nuevos casos en turistas (BBC Mundo, 2018).

De esta forma, es posible afirmar que el ‘síndrome de Jerusalén’, hasta la fecha, no es un trastorno con una entidad diagnóstica reconocida, sino un fenómeno reportado en entornos clínicos y que requiere mayor estudio y fundamentación para su completa comprensión.

Referencias:

  • Bar-El, Y., Durst, R., Katz, G., Zislin, J., Strauss, Z., Knobler, H. (2000) Jerusalem syndrome. The British Journal of Psychiatry, volumen (176), número (1), pp. 86 – 90. Recuperado de: www.cambridge.org
  • Bartkowski, J., Xu, X., Bartkowski, S. (2019) Mixed Blessing: The Beneficial and Detrimental Effects of Religion on Child Development among Third-GradersReligions, volumen (10) número (1) DOI: 10.3390/rel10010037
  • BBC Mundo (2018) Síndrome de Jerusalén, el curioso trastorno mental que hace que las personas se crean profetas o mesías. BBC Mundo Noticias: bbc.com. Recuperado de: www.bbc.com
  • Bhavsar, V., Bhugra, D. (2008) Religious delusions: finding meanings in psychosis. Psychopathology, volumen (41), número (3), pp. 165-172. Recuperado de: www.karger.com
  • Poleszczyk, A., Święcicki Ł. (2013) Jerusalem syndrome – a case report. Psychiatria Polska, tomo (47), número (2), pp. 253-360. Recuperado de: www.strona.ppol.nazwa.pl
  • Witztum, E., Kalian, M. (1999) The «Jerusalem syndrome» fantasy and reality a survey of accounts from the 19th century to the end of the second millennium. The Israel journal of psychiatry and related sciences, volumen (36), número (4), pp. 260-271. Recuperado de: pubmed.ncbi.nlm.nih.gov
R. Mauricio Sánchez
R. Mauricio Sánchez
Licenciado en Psicología por la Facultad de Ciencias de la Conducta de la UAEMex (México). Experiencia docente y en atención clínica en entidades privadas y públicas, como el Instituto de la Seguridad Social. Editor adjunto y redactor especializado en Psicología en Mente y Ciencia.

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R. Mauricio Sánchez
R. Mauricio Sánchez
Licenciado en Psicología por la Facultad de Ciencias de la Conducta de la UAEMex (México). Experiencia docente y en atención clínica en entidades privadas y públicas, como el Instituto de la Seguridad Social. Editor adjunto y redactor especializado en Psicología en Mente y Ciencia.