El consumo de pornografía se relaciona con la desregulación cerebral

Esta investigación aporta importantes hallazgos que correlacionan el consumo habitual de pornografía con cambios en la red frontoestrial.

El estudio publicado por Simone Kühn y Jürgen Gallinat, en el año 2014, buscaba determinar si el consumo habitual de pornografía se asociaba con cambios en la red frontoestrial. Este artículo fue publicado en la revista JAMA Psychiatry.

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Introducción al estudio sobre la relación entre el consumo habitual de pornografía y los cambios en la red frontoestrial

El contenido sexual es cada vez más evidente en los medios, estando presente en películas, videos musicales y páginas de internet de libre acceso. Dado que en Internet la pornografía no está regulada, actualmente es fácil acceder a contenido pornográfico sin restricciones y desde la privacidad de los hogares. Esta accesibilidad, asequibilidad y anonimato ha hecho que se aumente la cantidad de personas que acceden a este contenido. Algunos estudios han encontrado:

  • En Estados Unidos se calcula que el 66% de los hombres y el 41% de las mujeres consumen pornografía mensualmente.
  • Además se estima que el 50% del tráfico de internet se relaciona con contenido sexual.
  • En un estudio realizado con adolescentes suecos se encontró que aquellos que consumían pornografía diariamente mostraban una mayor predisposición a consumir contenido sexual ilegal y a desear replicarlo en la realidad.
  • En la pareja, se asocia el consumo habitual de pornografía con una disminución en la satisfacción sexual y a un intento de replicar lo visto.
  • Un estudio longitudinal encontró que el acceso a contenido pornográfico en internet podía ser un predictor para el uso compulsivo del ordenador.

Objetivo del estudio

Con este estudio se pretendía investigar correlatos neuronales asociados con el consumo habitual de pornografía, no necesariamente adictivo, en población sana; con el fin de explorar si este comportamiento se relaciona con estructuras y el funcionamiento de ciertas regiones del cerebro.

Participantes

En el estudio participaron 64 hombres, entre los 21 y los 45 años de edad, quienes no presentaban trastornos psiquiátricos o neurológicos. No se les indicó que el estudio se relacionaba con el consumo de pornografía; ni que pretendía evaluar sus efectos, pero se les explicó que se realizarían análisis cerebrales estructurales y funcionales, por medio de resonancia magnética.

Procedimiento de escaneo

Se tomaron imágenes estructurales y funcionales por medio de resonancia magnética. En una medición se le solicitó a los participantes que cerraran sus ojos y se relajaran, en otra se tomaron las mediciones cuando estuvieron en presencia de la tarea.

Cuestionario

Se administró un cuestionario relacionado con el consumo habitual de pornografía en donde se preguntaba:

  • ¿Cuántas horas en promedio consume material pornográfico durante un día de la semana?
  • ¿Cuántas horas en promedio consume material pornográfico durante el un día en el fin de semana?
  • ¿Cuántos años lleva consumiendo pornografía?

Con esta información se obtuvo el promedio de horas de consumo de pornografía.

Adicionalmente, se utilizó el Internet Sex Screening Test – Prueba de detección de sexo en internet -; y el Sexual Addiction Screening Test – Prueba de detección de adicción al sexo -. Finalmente, se utilizó el Internet Addiction Test – Prueba de adicción a Internet-.

Tarea para medir las reacciones de los participantes

Para la medición de la actividad cerebral y los posibles cambios estructurales, se usaron 60 imágenes con contenido sexual y 60 sin contenido sexual. La imágenes se presentaron en 6 bloques de 10 imágenes cada una, con una duración de 530 milisegundos por imagen.

Análisis de datos

Se evaluaron 4 áreas principales

  • Morfometría basado en vóxeles: Se refiere a la medición estructural del cerebro, específicamente el volumen de materia gris y blanca.
  • Reactividad funcional en la resonancia magnética: Resultados de la activación hemodinámica en presencia de los diferentes grupos de imágenes.
  • Análisis de mediación: Relación entre los resultados a nivel estructural y funcional.
  • Análisis de funcionalidad y conectividad: mapas de la relación entre funcionamiento y conectividad para identificar las áreas que responden al consumo de pornografía.

Resultados sobre la relación entre el consumo habitual de pornografía y la desregulación cerebral

Tras el análisis de los datos se pudo observar que:

  • De acuerdo con los criterios del Internet Sex Screening Test, 21 participantes fueron clasificados en riesgo de adicción a la pornografía.
  • Se encontró una correlación positiva entre los resultados del Internet Sex Screening Test y la cantidad de horas de consumo de pornografía reportadas.
  • Fue evidente una correlación negativa entre la cantidad de horas de consumo de pornografía y la cantidad de materia gris en el cuerpo estriado. Es decir, a más horas de consumo de pornografía, se evidenció menor cantidad de materia gris en el cuerpo estriado.
  • Además, se encontró una diferencia significativa entre las imágenes sexuales y la fijación, y ninguna diferencia entre las imágenes no sexuales y la fijación.
  • Una región prefrontal dorsolateral izquierda fue asociada negativamente con la cantidad de horas de consumo de pornografía; lo que implica que los participantes que consumían mayor cantidad de pornografía tenían menos conectividad entre el núcleo caudado derecho y la corteza prefrontal dorsolateral izquierda.

Discusión

En esta investigación se evaluaron los correlatos neurofuncionales y estructurales con la cantidad de horas de consumo de pornografía reportada por hombres. Los resultados indican que el volumen de sustancia gris en el núcleo derecho del cuerpo estriado se mostraba disminuido en los sujetos expuestos a mayor cantidad de pornografía. Además, la activación funcional en el putamen izquierdo del cuerpo estriado era menor a mayor cantidad de consumo de pornografía, en comparación con contenido no sexual. Esto implica que esta área está involucrada en el procesamiento de la información de tipo sexual. Finalmente, se comprobó que la conectividad en el lóbulo prefrontal dorsolateral izquierdo es menor a mayor cantidad de consumo de pornografía. Asimismo, las investigaciones han demostrado la importancia del cuerpo estriado en el procesamiento de la recompensa; las neuronas de esta zona responden con mayor intensidad a recompensas preferidas.

Además, los resultados de este estudio se relacionan con la hipótesis causal de otros trabajos, que defienden que una exposición intensa a contenido pornográfico genera una desregulación en la respuesta neural a los estímulos sexuales. La corteza prefrontal dorsolateral, que está implicada en la respuesta inhibitoria, la flexibilidad cognitiva, la atención y la planeación, envía conexiones al núcleo caudado. Estas conexiones están relacionadas con el procesamiento de la recompensa y las estrategias de acción para su consecución.

Conclusiones sobre el consumo habitual de pornografía

Con base en este estudio sobre la relación entre el consumo habitual de pornografía y los cambios en la red frontoestrial, se puede concluir que la activación cerebral generada por el consumo de pornografía puede estar relacionada con la desregulación en estructuras cerebrales y su funcionamiento; además se explicita una alta necesidad de estimulación externa y la tendencia a buscar material sexual novedoso y más extremo.
Los individuos con un menor volumen en el cuerpo estriado podrían necesitar una mayor estimulación externa para experimentar placer, y la pornografía puede ser más reforzante.

En conclusión, en este estudio se confirma que el cuerpo estriado y la corteza frontal dorsolateral están relacionadas con la adicción a lnternet, lo cual se ha investigado en varias ocasiones. Estas publicaciones afirman que en casos de adicción Internet, se presenta una disminución en la corteza prefrontal, junto con una disminución funcional, estructural y de conectividad en las vías frontoestriales.

Se recomienda para futuras investigaciones realizar estudios sobre los el consumo de pornografía no solo en pacientes sanos, sino también en población psiquiátrica, dada la relación entre el consumo habitual de pornografía y la depresión y el consumo de alcohol.

Finalmente, para futuros estudios, se recomienda estudiar el consumo de pornografía en relación con el sistema de recompensa.

Referencias:

Kühn, S., y Gallinat, J. (2014). Brain structure and functional connectivity asssociated with pornography consumption. JAMA Psychiatry, 71 (7), 827-834. Recuperado de: jamanetwork.com/

Sandra Correa
Sandra Correa
Licenciada en Psicología por la Universidad El Bosque (Colombia). Máster en Neuropsicología clínica. Experiencia de trabajo como docente, neuropsicóloga y psicóloga clínica en diversas entidades y en centro propio. Redactora especializada en Neurociencias en Mente y Ciencia.

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Licenciada en Psicología por la Universidad El Bosque (Colombia). Máster en Neuropsicología clínica. Experiencia de trabajo como docente, neuropsicóloga y psicóloga clínica en diversas entidades y en centro propio. Redactora especializada en Neurociencias en Mente y Ciencia.